Lidiar con las facturas y las citas médicas puede resultar bastante estresante. Lo último que necesita es un correo electrónico falso afirmando que debe una fortuna o amenazando con cancelar su próxima cirugía.
Los ataques de phishing dirigidos a hospitales y pacientes son una preocupación creciente, entonces, ¿cómo puede mantenerse a salvo?
Este es el trato: los correos electrónicos de phishing a menudo parecen legítimos e imitan logotipos de hospitales reales y jerga de atención médica. Es posible que lo presionen para que haga clic en un enlace para "actualizar la información de su seguro" o "descargar resultados de pruebas urgentes".
Pero hacer clic en ese enlace podría llevarlo a un callejón oscuro de malware y datos robados.
Entonces, ¿cómo puedes ser un detective digital y detectar a estos phishers?
Examinar al remitente
¿La dirección de correo electrónico es un revoltijo de letras aleatorias o falta el dominio oficial del hospital? ¡Bandera roja! Los correos electrónicos legítimos deben provenir de direcciones como "@[URL no válida eliminada]".
Cuidado con la urgencia
A los phishers les encanta jugar con el miedo. ¿El correo electrónico grita “SE REQUIERE ACCIÓN URGENTE” o amenaza con cerrar su cuenta? Respire hondo y verifique la información directamente en el sitio web de su hospital o llamándolos.
¿Adjuntos sospechosos? ¡No hagas clic!
A menos que espere específicamente un archivo de su médico, evite descargar archivos adjuntos de remitentes desconocidos. Estos podrían estar cargados con malware.
Palabras mal escritas y gramática incómoda
Los proveedores de atención médica legítimos tienden a tener buena gramática. Los errores tipográficos y las frases extrañas son señales de que un phisher podría no dominar el idioma inglés.
Piense antes de hacer clic
Pase el cursor sobre los enlaces del correo electrónico. ¿La URL de destino coincide con lo que se muestra en el texto? Los phishers suelen utilizar enlaces disfrazados para robar su información.
Cuando se trata de su información de salud, siempre es mejor prevenir que lamentar. Si algo le parece sospechoso, no dude en comunicarse directamente con su hospital para obtener una aclaración.